Isabel Fernández Morales. Envejecimiento en red. CSIC
Las posibles consecuencias de la decisión del Reino Unido de abandonar la Unión Europa empiezan a preocupar entre los residentes británicos en nuestro país. Analizamos algunas de las características y las inquietudes sobre el futuro de los británicos residentes en nuestro país, la gran mayoría jubilados.
El 23 de junio de 2016 se celebró en el Reino Unido y en Gibraltar un referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea. El 52% de los ciudadanos del Reino Unido votó a favor de abandonar la Unión Europea frente al 48% que apoyó la permanencia. Conocido como BREXIT, una abreviatura de dos palabras en inglés, Britain (Gran Bretaña) y exit (salida), y que significa precisamente eso, la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
Nunca antes un país miembro ha abandonado esta unión política y económica de 28 países que, desde sus inicios, no ha hecho más que expandirse. Con lo cual se abren muchas incógnitas acerca de las consecuencias de esta decisión, que entre otros, y por lo que más cerca nos cae, preocupa especialmente a los británicos residentes en nuestro país, y en particular a los jubilados, muchos de ellos llevan años residiendo, empadronados y con vivienda propia en nuestro territorio.
Las cifras hablan de que alrededor de 250.000 británicos (conocidos como expats) residen en España la mayor parte del año, además de los 13 millones de turistas británicos que recibimos cada año. Para que os hagáis una idea mejor, uno de cada tres extranjeros mayores de 65 años empadronados en España es británico. En provincias como Alicante residen la mayoría de los británicos empadronados (unos 73.000), le siguen Málaga (50.530), Islas Baleares (16.126), Santa Cruz de Tenerife (15.060), Almería (14.344), Murcia (13.696), Barcelona (12.473), Las Palmas (12.196), entre otras.
Otro datos, por ejemplo, los británicos son los extranjeros que más casas compran en España. O también es interesante conocer que la actividad económica del Reino Unido en Alicante representa el 7% del PIB de la provincia. Tras el referéndum rápidamente la Generalitat Valenciana ha indicado que van a reforzar la promoción turística de la comunidad en el Reino Unido. Y es más, sus autoridades han querido zanjar cualquier temor de los residentes británicos empadronados en sus provincias de que el Brexit pueda acarrear consecuencias negativas en su condición de usuarios de servicios públicos.
Por ahora no cambia la situación de los británicos residentes en España
El proceso de salida durará al menos dos años desde la notificación oficial. Mientras no se materialice el abandono del Reino Unido de la UE, se seguirá aplicando el reglamento comunitario, con lo que por ejemplo, la asistencia sanitaria tanto a los españoles en ese país y como a los británicos residentes en España «no corre peligro a corto ni medio plazo«, según aseguran desde el Gobierno de España.
También podemos escuchar al embajador británico en nuestro país, Simon Manley, que ha lanzado un mensaje de tranquilidad a los ingleses que residen en España que podrán vivir, trabajar y viajar, como han hecho hasta ahora, al menos en el plazo de estos dos años.
Spanish ambassador tells British expats living in Spain not to worry about Brexit vote
Más allá de esta fecha fuentes del Ministerio de Empleo y Seguridad Social recogidas por Efe, han explicado que un convenio bilateral con el Reino Unido será previsiblemente la fórmula que garantizará la asistencia sanitaria a los españoles que viven en ese país y a los ciudadanos británicos que residen en España. Durante esos dos años se podrá negociar un posible convenio bilateral, como ya ocurre con otros 23 países no comunitarios. Se trata de convenios de seguridad social entre España y cada uno de esos estados, en los que está incluida la asistencia sanitaria aunque con unas características específicas en cada caso.
Pérdida de poder adquisitivo
Hay otros asuntos que preocupan. Por ejemplo, a los jubilados les preocupa la pérdida de poder adquisitivo de sus pensiones si la libra esterlina se deprecia frente al euro. Con lo cual todo les resulta más caro en nuestro país. Además, muchos temen caer en un limbo respecto a su derecho a la pensión, a la posibilidad de trabajar aquí o residir o incluso para cosas tan sencillas como que el carnet de conducir se les convalide. También temen por sus casas y que puedan mantenerlas. En este sentido, la incertidumbre es grande. Pero hay que esperar al resultado de las negociaciones.
¿Brecha generacional?
Un aspecto que se ha reflejado en algunos análisis de los resultados del referemdun es la posible brecha generacional abierta en una mayoría de mayores de 54 más partidarios de la salida frente a una mayoría de jóvenes partidarios de la permanencia.
No es el caso de los británicos residentes aquí por más de 15 años que no han podido votar porque la legislación británica no se lo permite. La brecha generacional es un asunto delicado que ha sido recogido por numerosos medios de comunicación. Algunos hablan de cómo los jóvenes ingleses dicen sentirse traicionados y desamparados por los mayores, que no han tenido en cuenta su futuro. Pero es verdad que los jóvenes tampoco han acudido a votar en masa como los mayores y han registrado un alto índice de abstención, entre otras causas porque el referéndum ha coincidido con el inicio de las vacaciones. Además estos datos proceden de encuestas a pie de calle, y por tanto otros analistas indican que no es preciso y no conviene exagerar esa brecha.
De todos modos, ahora es el momento de las negociaciones, y se abre la posibilidad de participar para todos exponiendo razones y medidas. Como veis un tema que puede dar para mucho debate.