Antonio Abellán García, Pilar Aceituno Nieto, Diego Ramiro Fariñas. Envejecimiento en Red. Departamento de Población, CSIC.
La alta morbilidad y mortalidad durante la pandemia de Covid-19 ha puesto a los establecimientos de cuidados de larga duración en el centro del debate social, político y sanitario. La pandemia ha mostrado una realidad clara: hay una falta de información y deficiencias en el control y supervisión sobre estas instituciones; ello ha conducido a una infraestimación de los residentes, de las personas contagiadas y de los fallecimientos; también ha destapado otras carencias (falta de equipamiento y preparación) para afrontar situaciones de emergencia sanitaria.
Apenas existen estadísticas coordinadas y regulares en Europa sobre estos centros, salvo los datos de Eurostat que se comentan más abajo, la mayoría de los cuales están destinados a personas mayores. En esta nota queremos presentar una aproximación a su número, plazas y ratios para situar a España en el conjunto europeo.
Estos establecimientos agrupan una amplia gama de tipos, desde los puramente residenciales, alternativos a la vivienda familiar, hasta los que proveen cuidados especializados y medicalizados. Las características de los residentes dentro de cada establecimiento tampoco son homogéneas. Las definiciones entre países pueden variar, lo que conduce a medias muy divergentes; y en el caso de España también puede haber variedad en la inclusión según comunidades autónomas. En cualquier caso, destaca que la mayoría de estos centros son para personas mayores, además de otros para cuidados paliativos, centros de rehabilitación, de discapacidad, etc.
Los datos que presentamos proceden de la ECDC (European Centre for Disease Prevention and Control), que a su vez utiliza información de la encuesta HALT-3. Eurostat publica su estadística de camas de cuidados de larga duración en centros de cuidados y residenciales (HP.2) que no coincide con la presentada por el ECDC, pero mantiene cierta regularidad en su información.
En Europa había 62.471 centros de cuidados de larga duración con 3.486.999 camas, en 2017, según aquella fuente, ECDC, con un tamaño medio de 56 camas por establecimiento (Tabla 1, Figura 1). Hay 3 camas por cada cien personas de 65 y más años (Figura 2). España se sitúa muy próxima a los valores medios europeos, con 69 camas de tamaño medio por centro y 4,1 camas por cada 100 personas de 65 y más años. Las cifras presentadas en este post se aproximan a nuestro recuento/censo de residencias para personas mayores en España.