Comprender y solucionar el envejecimiento desde el laboratorio

Abr 24, 2018

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Juan Carlos Izpisua es uno de los prestigiosos investigadores españoles que trabajan en laboratorios internacionales para tratar de comprender nuestra biología y solucionar las enfermedades, sobre todo las ligadas al envejecimiento. Ofreció una de sus últimas conferencias en Salamanca, invitado por el Centro Internacional sobre Envejecimiento, una iniciativa de la Fundación General de la Universidad de Salamanca y la Fundación General del CSIC.
El bioquímico español, Juan Carlos Izpisua, es director del laboratorio de expresión génica en el Instituto Salk de estudios biológicos en California. Está especializado en la biología del desarrollo, y es un placer escucharle en una brillante y clara conferencia en la que habló de los abordajes celulares, genéticos y epigenéticos para un envejecimiento saludable. Que se puede encontrar en Youtube:

Crear órganos para luchar contra el envejecimiento

Izpisua ha sido merecedor de numerosos galardones a lo largo de los años ya que su trabajo ha ayudado a comprender los mecanismos celulares responsables del desarrollo embrionario. Además, sus descubrimientos están teniendo un gran impacto para novedosos tratamientos de enfermedades y está llevando a nuevos límites la posibilidad de crear y regenerar órganos y tejidos, y por tanto a la lucha contra el envejecimiento.
Precisamente, una de las preguntas que su equipo se hace y trata de responder es si es reversible el envejecimiento.  Pero más que de inmortalidad hablan de enlentecimiento, es decir, de retrasar la aparición de enfermedades asociadas al envejecimiento. En su laboratorio están realizando dos abordajes. Por un lado, el uso de células, tejidos y órganos nuevos creados en el laboratorio para tratar de reemplazar aquellos que se pierden en ese proceso del envejecimiento y por otro,  la posibilidad de utilizar herramientas que permitan cambiar nuestro genoma y epigenoma.
Respecto al primero, hay dos líneas. In vitro e in vivo, para entendernos. En ciencia, in vivo se refiere a experimentación hecha dentro o en el tejido vivo de un organismo vivo.  Mientras que, in vitro se refiere a una técnica para realizar un determinado experimento en un tubo de ensayo, o generalmente en un ambiente controlado fuera de un organismo vivo. Izpisúa explicó cómo en los últimos 10 años se ha conseguido generar en laboratorio, in vitro, en placas petri todas las células que componen nuestro organismo, a partir de células adultas o a partir de un simple pelo. Es una línea prometedora pero que tiene mucho que avanzar aún. Porque aún no hemos sido capaces de generar en el laboratorio ninguna célula que sea idéntica a la que genera la naturaleza.
Por otro lado, trabajan en la posibilidad de generar órganos para posibles trasplantes.  Y están haciendo experimentos generando órganos humanos en animales huéspedes para trasplantes. Lo han probado entre ratones y ratas y con lo aprendido están probando la generación de órganos humanos en cerdos como animal huésped. Llevan realizando este experimento alrededor de cuatro años. En este tiempo se han hecho más de tres mil experimentos con embriones de cerdo y células humanas. Y han conseguido que se integren aunque todavía no han llegado a la creación de órganos funcionales como si lo consiguieron al integran embriones de ratón con células de rata. Izpisúa contó por primera vez en esta charla que están probando en el mono, mucho más cercano evolutivamente a nosotros y con periodos de gestación similares. Y han  comprobado que se integran bien.
El científico plantea no tanto tener granjas de monos para crear órganos como tratar de entender con estos experimentos las barreras evolutivas que nos impiden hacer este experimento más eficiente entre el humano y el cerdo. No se trata de utilizar el mono, pues no solo no sería práctico, tiene solo una cría y hay posibilidad de transmitir enfermedades infecciosas del mono al hombre, y sobre todo además están las consideraciones éticas.
Para conocer hasta qué punto será posible contar con estas técnicas en el futuro para disponer de órganos de reemplazo cuando hagan falta, escuchamos a Izpisua:

Editar el genoma y el epigenoma para enlentecer el envejecimiento

La segunda parte de la charla fue sobre las posibilidades que ofrece la alteración controlada del genoma y el epigenoma para enlentecer el envejecimiento y curar enfermedades genéticas.
Hoy día no solo es posible leer el genoma humano sino también editarlo, es decir, copiarlo, cortarlo, pegarlo… y estos avances se han producido tan solo en los últimos 18 años. Las técnicas de edición genética y epigenética se están probando en ratones para la cura y prevención de enfermedades como las relacionadas con alteraciones del ADN ndrial, el síndrome Down y otras enfermedades relacionadas con el envejecimiento como patologías de las articulaciones, de la retina o del cerebro, como demencias o Parkinson.
La epigenética es un conjunto de reacciones químicas y demás procesos que modifican la actividad del ADN pero sin alterar su secuencia. Izpisua habla de una técnica que edita el genoma pero sin tocar los genes, no los corrige ni corta, sino que trata de modificar otras cosas que ‘se les pegan encima’ para regularlos; con ello se pueden revertir  síntomas de enfermedades asociadas al envejecimiento. Aunque el investigador advirtió que hay que ser cuidadoso con esto todavía.
Isabel Fernández Morales. Envejecimiento en red

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